Wednesday, April 8, 2020

HERENCIA

En Semana Santa, una de las experiencias que más disfruto es ver pasar el trono de "Salesianos" por las calles de Málaga. Algunos años, he llegado a verlo desde 3 sitios distintos solo por el gusto de disfrutar varias veces de su paso.

A muchos les puede extrañar esta admiración que siento, ya que no es uno de los tronos más grandes, ni tampoco de los más lustrosos, pero para mi es especial, no sólo porque haya tenido el placer de estudiar 13 años en el colegio que fundó la cofradía, ni por haber sido un tiempo hermano de la misma portando al Cristo de las Penas y a María Santísima del Auxilio, sino por el mensaje que transmite al pueblo.


La escena remite a Jn 19, 26-27, pasaje en el que Jesús desde la cruz se dirige -en primer lugar- a María para decirle: "Mujer, ahí tienes a tu hijo" (Juan, que estaba "a su vera"), para luego dirgirse a éste diciéndole: "Hijo, ahí tienes a tu madre". ¿Qué mejor regalo podría habernos dejado que su propia madre? Los cristianos de ninguna manera podemos quedar huérfanos ni de padre... ni de madre. María, paciente nos escucha bajo nuestra cruz de cada día.

También Dios ha querido dejarnos otra madre: la "madre Tierra", para que la cuidemos y también -¿por qué no decirlo?- para que disfrutemos de ella. Estos días, respira un poco mejor porque en las calles hay menos contaminación. ¡Qué dejada la teníamos!

Cuidemos a nuestras madres. Ellas tienen la raíz. Ellas tienen la matriz de la vida. Es la mejor herencia que podríamos tener.

Os dejo una canción de Tontxu para que reflexionemos un poco más sobre esto:


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Un par de días después de la primera publicación de esta entrada, me encontré con una lectura que ilustra un poco mejor el sentido de la herencia. La comporto con vosotros:
"Mirad, para disponer de una herencia, es preciso que conste de la muerte del testador; pues un testamento adquiere validez en caso de defunción; mientras vive el testador, todavía no tiene vigencia. De ahí que tampoco faltase sangre en la inauguración de la primera alianza" (Heb 9, 16-18).

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